Quizás muchos calamonteños conozcan a Felipe J. Delgado (Calamonte, 1976) tan sólo por estos tres últimos años en los que ha estado al frente de la edición digital y de papel de HOY Calamonte, pero es un periodista ya veterano que pronto cumplirá 20 años en el oficio.

Sentado entre libros, Felipe cuenta que antes de ser corresponsal local para HOY se formó en la Universidad de Salamanca: «estudié Periodismo en Salamanca del 94’ al 99’. (¡En el siglo pasado!», dice entre risas), pero antes de eso, y como la mayoría de los inicios en el mundo del periodismo son inescrutables, el de Felipe tampoco fue una excepción: comenzó haciendo crónica taurina para HOY. Tenía 17 años. Después, en la Facultad, cuando le dijo a un profesor que se llamaba Íñigo Domínguez de Calatayud que quería hacer prácticas profesionales y que él le contestara «pos vale», empezó a colaborar en ‘La Gaceta de salamanca’. Así lo recuerda: «Cuando estaba terminando el curso, me acerqué a ‘La Gaceta’ y pregunté si podía hacer prácticas con la temática taurina. Entraba a las 8 de la tarde y salía a las 4 de la mañana con el periódico calentito. Recién impreso. Podías pasarle el dedo a la tinta de las páginas y mancharte. Recuerdo que llegaba a casa oliendo a papel y periódico, era una cosa bastante curiosa».

Después de esta primera aventura, Felipe ha pasado por todos los formatos posibles. «Yo siempre decía que no quería trabajar en algo que no tuviera que ver ni con internet, ni con deporte, ni en Badajoz, y me estrené con ‘Extremaduraenforma.com, que se hacía en Badajoz, y que fue el germen de ‘Región digital’. Después pasé por Cadena Cope, Canal Extremadura, ‘El periódico Extremadura’, el Gabinete de Prensa de la Junta de Extremadura, y he tenido la fortuna de trabajar con tres presidentes autonómicos, aprobando oposiciones de interino. Estuve la primera legislatura de Vara y un año con Monago. Me fui presentando a varios exámenes y quedé en la bolsa de trabajo, y ha sido ahora cuando me han llamado de la Junta de nuevo como interino».

Pero entre su última experiencia profesional en la Junta y la que ahora vuelve a iniciar, también en el Gobierno autónomo, Felipe J. Delgado ha tenido el desempeño periodístico por el que está aquí, en esta sección de ‘gente cercana’

El HOY Calamonte

Y es que hace tres añosse embarcó, de la mano de su compañero de profesión Pablo Sánchez, en una nueva experiencia. «Se trataba de algo que ya estaba funcionando en varias localidades extremeñas y con resultados muy positivos. Partimos con las referencias del hiperlocal que se hacía en otras localidades, como Fregenal de la Sierra o Na valmoral de la Mata, y empezamos a hacer HOY Calamonte», afirma.

Los medios de comunicación gratuitos existen porque les llega financiación por la vía de la publicidad: por anunciantes privados o institucionales. «En este caso es curioso que el periódico tuviera el apoyo institucional dl Ayuntamiento de Arroyo de San Serván y sin embargo, no lo tuviera del de Calamonte. Pero porque desde este gobierno local no se entendió bien qué significaba este proyecto informativo», señala. Y añade: «se entendía que este proyecto venía a atacar a los gobernantes, cuando este proyecto lo que realmente hace es una función informativa de las cosas que les pasa a los ciudadanos».

Cuando el proyecto se inició, el gobierno local estaba formado por el Partido Popular e Izquierda Unida y según explica Felipe «hubo informaciones que no gustaron al PP, y de la misma manera, desde que el PSOE gobierna, ha habido informaciones que no han gustado al PSOE. Pero también hubo otras informaciones que no gustaron a Izquierda Unida y a Calamonte Avanza». En este sentido, explica su función periodística: «uno está para contar las cosas que importan, porque todo lo demás son relaciones públicas. Y es que cuando te dan la palmadita en la espalda alguien que tiene intereses es que algo estás haciendo mal profesionalmente hablando».

El motor, el periodista

El motor del periódico es el periodista, que además de ocuparse de la producción en su más amplio significado, tiene que estar pendiente de cada noticia relevante, buscar las fuentes de información y unir las piezas del puzzle para ofrecer a los ciudadanos el servicio de información lo más veraz posible.

«Este periódico --asegura—requiere de muchas horas de trabajo, salir a la calle y tener mucha exposición pública, y a veces se producen críticas infundadas, pero hay que contar con ello. Ni los halagos te pueden hacer creer que eres un buen periodista, ni las críticas pueden hacerte pensar que eres un mal periodista. Tienes que estar por encima de eso» termina diciendo con el dedo índice levantado y compartiendo la frase a modo de recomendación entre compañeros.

En este sentido, Felipe J. Delgado señala que «hubo veces que me ponían a escurrir en las redes sociales porque no había contado algún hecho, y entonces yo decía: ‘bueno, el mismo esfuerzo que has dedicado en ponerme verde por las redes sociales podrías dedicarlo en darme un toque y decirme que tal cosa está pasando y nos ahorramos muchas cosas’». Muchas veces, las críticas le llegaron por su información sobre el Calamonte: «pero claro, si el Calamonte ha jugado mal tengo que contarlo, y si juega bien también lo cuento. El problema es que nunca dejas a nadie contento. Y, ojo, esa no es la pretensión porque el deber del periodista es informar de lo bonito y de lo feo», concluye. El periodismo local, sin embargo, también da satisfacciones: supone una gran oportunidad para conocer el pueblo y permite darse cuenta «de la relevancia social que tiene este trabajo».

Justo aquí es cuando Delgado se pone serio y dice: «creo que he conseguido que cuando la gente se quería informar, la gente ha acudido a HOY Calamonte, digital, por Facebook o en papel». Y en el mismo tono indica: «la gente sabe que lo que se publica es verdad. Si digo que la burra es blanca, es porque tengo los pelos de la burra en la mano, y por ahora nadie me ha denunciado por injurias, si bien había muchas ocasiones que buscaba contrastar noticias, pero había quien no quería hablar y hasta ahí yo no puedo hacer más».

Buenos momentos

En estos tres años ha habido también buenos momentos. Los incontables y dispersos, esos en que ha visto con satisfacción que la gente se ha reconocido en el periódico, y otros concretos: «recuerdo informar de la subida del Calamonte a Tercera. Fue muy bonito, porque veníamos del año anterior que no se pudo subir, eso me encantó». Las dos portadas que más le gustó fueron la de «las mujeres que iban disfrazadas de sevillana en un remolque durante los carnavales, y luego la del mes de agosto con una foto hecha a las 4 de la mañana en plena feria al Grupo Ácido con la plaza a reventar»..

Sin embargo, la mayor satisfacción, la que permanece, es «cuando la gente llama a HOY Calamonte ‘el periódico del pueblo’. Eso es muy bonito porque sienten que el periódico es algo suyo. Incluso preguntan por el periódico cuando sale».

Al final las despedidas llegan. Felipe lo hace con una frase de Pedro Erquicia: «cuando terminaba ‘Documentos Tv’ decía: ‘les esperamos la próxima semana para contarles las cosas que pasan a espectadores como usted’. Yo he hecho una readaptación y digo a los lectores de HOY Calamonte: «les esperamos cada mes para contarles las cosas que pasan a lectores como usted».