l. expósito
Martes, 2 de julio 2019
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Junio fue un mes agridulce para el empleo en la región. Como sucede siempre en esta época del año bajó el paro y subió la afiliación. Sin embargo, los números fueron menos llamativos que los de años anteriores.
Según los datos publicados ayer por el Ministerio de Empleo, las oficinas del Sexpe registraron 1.770 parados menos en junio. Es un cifra sensiblemente inferior a la de años anteriores. En 2018, sin ir más lejos, el número de desempleados en esta época del año descendió en 5.453; y en 2017 lo hizo en 3.422 extremeños. Con todo, la bajada porcentual en la región (-1,89%), es muy parecida a la de la media nacional (-2,07%), lo que quiere decir que la desaceleración en el ritmo de reducción del paro no es exclusiva de Extremadura, también se está dando a nivel nacional.
Con estos datos, Extremadura cerró el año pasado con 92.073 desempleados, que son 5.827 menos que un año antes. En este caso, el descenso relativo, del 5,95%, es mayor que el de la media nacional, del 4,63%.
Aunque ayer hubo voces que achacaron la evolución menos positiva de los números a la agroganadería, lo cierto es que todos los sectores se comportaron peor de lo esperado. Es cierto que el sector primario registró 90 parados más, cuando el año pasado fueron 1.121 menos en esta misma época del año. Pero también sufrió el sector servicios, que registró un descenso de 1.643 parados el mes pasado cuando el año pasado este fue de 3.382. En menor medida, algo parecido pasó con la industria, con 57 parados menos (-213 en 2018), y la construcción, con 184 desempleados menos (-438 en junio del año pasado). Finalmente, el grupo sin empleo anterior tuvo 24 parados más, cuando en 2018 fueron 299 menos.
Así las cosas, las mejores noticias vinieron del lado de la afiliación a la Seguridad Social. Junio registró 4.124 afiliados más, un incremento que aunque es menor que en años anteriores (el año pasado fueron 5.821) está por encima de la media nacional. Así, en términos porcentuales, el número de trabajadores creció en la región el 1,03% mientras que en el conjunto de España solo lo hizo el 0,39%. Según datos recabados por Comisiones Obreras, el 57% de ese incremento en la región se corresponde con trabajadores del sector agrario. Con estos números, Extremadura alcanza los 404.845 trabajadores dados de alta, que son 9.298 más que hace un año, el 2,35%. En la media nacional, el incremento anual ha sido del 2,69%.
Por otro lado, en junio se firmaron 69.910 contratos en la región, lo que supone un descenso de 7.011 (-9,75%) respecto al mes anterior. De ellos, 62.887 fueron temporales y 2.023 indefinidos.
La Junta destacó el crecimiento del empleo, la creación de trabajo neto y un ritmo estable de bajada en el paro. Javier Luna, secretario general de Empleo en funciones, aseguró respecto al sector agrícola que también experimentó una subida del paro en años anteriores, dado que son campañas que duran cuatro meses «y tienen sus altibajos, sus subidas y bajadas».
Con carácter general, el desempleo bajó más en la ciudad de Badajoz y de Plasencia, así como en las zonas de regadío de las Vegas Altas del Guadiana. En cuanto a las contrataciones, remachó que el número descendió casi el 10% con respecto al mes pasado para situarse en 64.914, pero que es «importante» precisar que la contratación que baja es la temporal y se incrementa la indefinida.
Gema Cortés (PP) mostró por su parte su preocupación por la debilidad del mercado laboral en la región y la temporalidad en el empleo, que afecta al 97% de los contratos firmados el pasado mes de junio, un dato que calificó como demoledor. Cortés lamentó que Vara no reclame el plan de empleo especial de 460 millones de euros que «sí pidió insistentemente al gobierno de Rajoy».
Tras reconocer que es una buena noticia la bajada del paro, la portavoz del PP lamentó que haya sido por debajo de la media nacional, algo que es ya una dinámica y con brechas difícilmente salvables.
Desde Ciudadanos, David Salazar destacó que el descenso del paro «es poco comparado con otros meses de junio» y mostró su preocupación porque haya «un cambio de tendencia». «Parece que empieza a disminuir el ritmo, pero no obstante habrá que esperar por lo menos hasta septiembre para ver y analizar los datos y saber si esto es algo estacional o continúa así», apuntó.
Para Podemos, el mercado laboral extremeño está en una situación de estancamiento y advirtió de que la precariedad, la temporalidad y la inestabilidad siguen siendo sus características principales.
En clave sindical, UGT Extremadura advirtió de que los altos índices de eventualidad dibujan un mercado de trabajo frágil y amenazado permanentemente por la coyuntura. Afirma que la alta tasa de contratos a tiempo parcial muestra un escenario en el que, pese al aumento del salario mínimo interprofesional, «el fenómeno de los trabajadores pobres parece crecer descontroladamente».
CC OO indicó que, a pesar de la disminución del número de parados y de que ha sido especialmente positiva la subida de la afiliación, también se está experimentado «una tendencia a la ralentización» en la creación de empleo y una «elevada estacionalidad» en la contratación.
En este mismo sentido, la patronal Creex valoró el incremento de afiliados, pero advirtió de la desaceleración en la creación de empleo.
El secretario general de la Creex, Francisco Javier Peinado, dijo que el aumento del número de afiliados es una buena noticia, no obstante, la patronal autonómica esperaba mejores cifras.
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